Las iniciativas que nacen por amor nunca pueden salir mal, y la historia de Slutty Su, Bambi & Chessemaker es una declaración de amor en toda regla. Tres amigos, una pasión común por la música y un club con el que tienen una vinculación especial, que decidieron hacer públicas sus noches privadas y organizar sesiones como la de hoy para mostrarte sus intimidades, que van del deep house al dark tech, sin manías pero con armonía, como se tienen que hacer las cosas cuando hay más de dos jugando. Con los tres en la cabina, es una noche para sentirte un poco voyeur.